Banca cí­nica

Hoy he pasado delante de esa sucursal y me han entrado ganas de prenderla fuego, sin sacar antes mis ahorros ¿Para qué? Si ya me da asco incluso mi propio dinero y tengo razones suficientes para quererla prender fuego…

La antigua Caja de Burgos jugo fuerte con el ladrillo, pese a quien le pese y lo niegue quien lo niegue. Las puertas de la entidad siempre han estado abiertas a especuladores locales y regionales, el triangulo, banca, constructor/especulador y polí­tico cerraba el anillo de confianza para un timo que va y ha jodido muchas vidas, hipotecas, deudas, morosos… son los frutos de tu dinero y el de todos que ha servido para esclavizar a la juventud y dar crédito al especulador. Tengo muchos amigos hipotecados hasta las cejas que se dejaron llevar por el furor ladrillero.

Pero la fiesta del ladrillo tenia su fin y el fin es ahora, ahora la cosa esta pachucha, el dinero, tu dinero y el de todos anda “invertido” en fincas, pisos, negocietes, hipotecas… cosas que han perdido valor o su valor es dudoso. ¿Ahora qué? Ahora las comisiones aumentan, las tarjetas se pagan, las transferencias también, hay fusiones, hay ayudas y esas ayudas salen de los impuestos, de tu dinero y el dinero de todos. Nuestro dinero se lo han llevado los especuladores y ahora tenemos que recuperarlo.

La cosa sigue mal y pese a recibir ayudas y aumentar las comisiones nuestros polí­ticos necesitan más oxigeno, más solvencia, más dinero, así­ que mientras en unos despachos unos polí­ticos negocian subir las jubilaciones con los sindicatos amarillos y los especuladores en otros despachos otros polí­ticos negocian prejubilaciones para sus trabajadores, para esos trabajadores que no saben ni siquiera lo que es hacer 40 horas semanales. Los pobres trabajadores no tienen la culpa, pero tampoco tu ni yo que por desgracia no trabajamos en Banca cí­nica y vamos a trabajar más para pagar el desaguisado de esos polí­ticos que se aburrí­an en la sede de su partido y se metieron a banqueros. Pagaremos el agujero de la banca, el de las prejubilaciones, el que nos robaron los especuladores…

Banca cí­nica va a prejubilar a trabajadores de 54 años, que no saben lo que es doblar el lomo ni currar 40 horas semanales, en total serán 1.100 trabajadores. 1.100 trabajadores que se han beneficiado de la doble moral a la que juegan los polí­ticos, al resto nos espera un destino mucho menos halagí¼eño, el que dicta la otra moral.

Y mientras esos señores polí­ticos que con solo currar cuatro años de su vida ya tienen derecho a una pensión nos enseñan y nos dictan lo que tenemos que trabajar a mi lo único que me apetece es quemarles el garito. Así­ de claro.