El pasado mes de septiembre, tras los comicios del 22 de mayo a las alcaldías y aprovechando el tirón mediático del 15M, el Diario de Burgos, ese panfleto de tan pésimo gusto, publicaba un artículo dedicado a los concejos abiertos en la provincia de Burgos.
Bajo el título de “La Democracia Real además puede ser cierta” (18/9/2011), las malas artes del periodismo, o mejor, el mal arte del periodismo, siviendose de una burda descripción de lo que hoy no es más que un espantapájaros administrativo, se basta para ocultar todo el significado real de lo que es hacer política en colectivo, todo el potencial de lo que en su momento fue una forma de organización autónoma y asamblearia que se extendió por toda la piel de la península ibérica.
Nos conformamos aquí con transcribir, de dicho texto, las palabras de un concejal cuyo ayuntamiento ha optado por esta fórmula de gestión de las legislaciones vigentes:
“Por ejemplo, si a los vecinos se les explica que hay que subir una tasa y la asamblea lo apoya, la medida será mucho mejor entendida que si la impone el alcalde”
La transparencia de estas palabras, sobre la esencia de la democracia en el proyecto de dominación capitalista, nos dejan sin nada más que añadir. Se sobran por sí solas.
Por nuestra parte, para salir de esta indigencia del conocimiento y del pensamiento crítico, a la que nos quieren someter los medios de (in)comunicación, proponemos una reciente entrevista en audio a Félix Rodrigo Mora, feroz púgil en todos los rings por el saber autónomo y combativo.
Ya conocido en Burgos por sus veladas en la Biblioteca La Maldita, o el eco que de él se ha hecho Radio Ondaexpansiva, es un gran estudioso de este tema como queda registrado en su libro “Naturaleza, ruralidad y civilización” (Editorial Brulot).
Con el podremos repasar los orígenes del concejo abierto, su calado social y su verdadero significado, los motivos de su decadencia y derrota, así como su paso por las diferentes épocas de la dictadura democrática capitalista ( o democrática dictadura capitalista, el orden de los factores no altera el producto). No faltan tampoco las obligadas referencias al 15M, pero en esta ocasión, debido a su implicación en primera persona en este movimiento, y no al servicio de una pluma a sueldo.
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