Según ha informado la Asociación de Senegaleses en España, blog Africanidad y varios medios de Senegal, en el día de ayer se habría producido la muerte, o más bien el asesinato, de un segundo ciudadano senegalés, Ousseynou Mbaye, tras las cargas policiales de la noche del jueves en el céntrico y multicultural barrio de Madrid.
El fallecido, Ousseynou Mbaye, habría sufrido un traumatismo craneal que le habría causado un proyectil contundente aunque este hecho está por confirmar. Se desconoce quién habría arrojado dicho proyectil. Se afirma asimismo que el cadáver permaneció 4 horas en la calle hasta ser retirado por los servicios médicos. Además hay mas personas hospitalizadas por traumatismo craneales. (Fuente obtenida del blog Africanidad)
Con este fallecimiento ya son dos las personas asesinadas en Lavapiés por ser inmigrantes y manteros, más múltiples personas heridas por parte de la policía racista y asesina. No son las únicas, el año pasado también falleció otra persona que fue perseguida en Tarragona por las mismas causas, por no comentar las miles que mueren al cruzar las fronteras. Este país da asco, damos asco. Las personas que han salido a las calles estos días en Lavapiés nos están mostrando que es la única manera de hacerlo, luchando mano a mano, unidas contra quien te oprime, mostrando la rabia y el rechazo frente al racismo imperante que nos asesina día a día.
Los políticos de turno se lavan las manos, mandan a sus mercenarios a resolver el problema, dando ostias por doquier y reprimiendo a las personas por simplemente no ser de aquí. Señores los verdaderos culpables son ustedes, por las políticas de mierda, por el cierre de fronteras, por el odio que generan día a día contra lo de fuera; para nosotras las de fuera son nuestras hermanas. Los que sobran en los barrios y ciudades son los políticos y la policía.
La noche del jueves en Lavapiés si hubo disturbios, por la dignidad de un colectivo, por ser inmigrante y de clase obrera, como respuesta de la rabia contenida. Donde se atacaron a los culpables de estas situaciones de miseria, los bancos, las salas de apuestas y las inmobiliarias; que desahucian, te roban el sueldo, te engañan, nos hacen migrar y abandonar a los nuestros.
Apoyamos a las personas que luchan por su dignidad, que no nos dividan, ni nos confundan. SI NO EXISTIERAN FRONTERAS, Y SI NINGUNA PERSONA FUERA ILEGAL, ESTO NO SUCEDERíA.
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