El olvido

La desmemoria es una actitud de nuestros gobernantes desean inculcar entre la población. Renunciar a la crí­tica, agachar la cabeza y callar, mirar para otro lado, en definitiva olvidar. Sobre todo si aquello a olvidar es algo que pueda suponer algún problema para sus conciencias. Eso es púes lo que recomienda el ex­concejal de Policí­a Eduardo Francés en lo referente a los hechos del 18 de Agosto de 2005. Lástima que el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Burgos, al que él pertenecí­a, no opine lo mismo y continúe solicitando años y años de cárcel para los vecinos encausados: ¿En qué quedamos Señor Francés?

Durante el pasado aniversario de los hechos del 18 de Agosto de 2005 Eduardo Francés, exconcejal de Policí­a Local y Cultura sorprendí­a con unas declaraciones realizadas a un medio de comunicación local en las que sugerí­a el olvido como mejor solución para la situación en la que actualmente se encuentran los vecinos de procesados.

Nos cuesta reconocer en esas palabras al mismo hombre que dí­as después de aquel 18 de Agosto de 2005 tronaba en rueda de prensa televisada que además de los detenidos tení­a una lista de 15 o 20 subversivos que si fuera preciso, y por su empaque torero, esa misma noche se iban a dormir a los calabozos de la Avenida Castilla y León.

Aquel mismo hombre que en diciembre de 2005 denegó el permiso a los vecinos de Eladio Perlado para proyectar el documental ¿De quién es la calle? en la casa de la Cultura de Gamonal aduciendo vagas excusas.

Imagen por cortesia de Morbido

Lastima Señor Francés que desde el Ayuntamiento de Burgos no piensen igual que usted y sigan exhibiendo sus aires de revancha. ¿No le parece que 54 años de cárcel es una cifra demasiado alta incluso para polí­ticos trado-franquistas como ustedes?

Para el populacho y la chusma se sigue prescribiendo el olvido como medicina que todo lo cura. Va siendo hora de recordar, y recordarlo todo.