Gamonal puede significar un antes y un después en la conciencia colectiva

La revuelta de Gamonal contra la construcción del bulevar ha despertado gran interés tanto en los media oficiales como en otros medios crí­ticos. La lucha de los vecinos de este peculiar barrio burgalés y el proceso asambleario que están llevando a cabo puedem significar el despertar de la conciencia colectiva de aquellos que siempre han sido relegados a los márgenes de la historia. Publicamos a continuación la entrevista integra que el periódico CNT ha realizado a Modesto Agustí­, colaborador habitual de DV, sobre el conflicto de Gamonal y sus posteriores consecuencias.

¿Cuál es la razón del éxito de las protestas de Gamonal?
Para comprender las protestas en Gamonal es necesario acercarse a la historia de este barrio que no puede entenderse si no es a través de sus conflictos y luchas sociales. Gamonal fue creado a toda prisa en la etapa final del franquismo para dar cabida al aluvión de población que proveniente de los pueblos de la provincia se desplaza a Burgos para trabajar en el Polo Industrial de Desarrollo creado a partir de 1964.  A partir de ese momento se convierte en el almacén de mano de obra barata de los grandes empresarios de la ciudad y en la zona más poblada de Burgos, donde actualmente se hacina casi la mitad de la población.

En Gamonal cada uno de los espacios verdes, dotaciones o logros sociales se han logrado gracias a las luchas vecinales que desde finales de los años setenta han llevado a cabo sus vecinos. El reciente conflicto contra el bulevar no es más que la expresión de una realidad que está arraigada en el más profundo ADN de sus habitantes donde mayores y jóvenes, mujeres y hombres han salido a la calle a lo largo de su historia para reivindicar los derechos que desde las instituciones siempre se les han negado. Las protestas contra el bulevar se comprenden solamente si tenemos en cuenta la extracción obrera de este barrio, que se ha echado a la calle ante un proyecto especulativo diseñado sin contar con sus vecinos y que buscaba únicamente el beneficio de las grandes empresas de la construcción.

Más allá del parking, ¿qué es lo que ha hecho estallar a los vecinos del barrio?
A pesar de que a nivel mediático el actual conflicto se ha conocido sólo a partir de enero de 2014, las protestas contra el bulevar se han desarrollado durante varios meses. La cerrazón por parte del Ayuntamiento de Burgos que buscaba a toda costa realizar el proyecto haciendo oí­dos sordos al rechazo vecinal ha sido la gota que ha colmado el vaso.  En una época actual donde la crisis económica, el desempleo y los desahucios, son realidades que se sufren de forma intensa en Gamonal, realizar un proyecto faraónico como el del bulevar donde se iban a dilapidar 13 millones de euros era algo que soliviantaba a los vecinos del barrio.

Este hecho, sumado a la especial idiosincrasia de la ciudad de Burgos, donde polí­tica y ladrillo se dan de la mano a través de complejas redes clientelares, no hay que olvidar que detrás del proyecto del bulevar está la inquiétate figura de Antonio Miguel Méndez Pozo, empresario de la construcción y actual magnate de los medios de comunicación que fue condenado por corrupción principios de los noventa en el llamado Caso de la Construcción de Burgos, han contribuido a que miles de personas expresasen su rechazo ocupando de forma indefinida las obras y sufriendo una desmesurada represión policial. Una situación que lejos de frenar la movilización, ha hecho  posible que se extendiera más allá del propio barrio.

¿Qué ha sido más importante para el barrio, paralizar las obras del Bulevar o el resurgir de la vida asamblearia reokupando La Chispa y montando vosotros mismos la Fiesta de las Candelas?
La paralización del bulevar ha sido posible gracias a la movilización de los vecinos que desde el inicio mismo de las protestas se han organizado a través de asambleas y comisiones que marcaron varios puntos básicos en sus reivindicaciones como la liberación del casi medio centenar de personas detenidas o la salida de las fuerzas policiales del barrio. El proceso asambleario que surgió en Gamonal no se ha detenido con la paralización de las obras y trata de conseguir que sean los propios vecinos los protagonistas de las decisiones que afectan al lugar donde viven. La organización de las Fiestas de las Candelas al margen de las instituciones o la recuperación de un espacio que desde hace más de una década estaba abandonado son expresiones más de este proceso de empoderamiento que se está desarrollando en Gamonal

Tras conseguir parar las obras del cacique Antonio Miguel Méndez Pozo mediante la lucha, personas del barrio han viajado por el paí­s (Vallecas, Pamplona, Barcelona…) dando charlas sobre lo ocurrido. ¿Es eso el efecto Gamonal?
En parte así­ es, pero lo fundamental del llamado Efecto Gamonal es que un conflicto cómo el que hemos vivido y en el que los vecinos han logrado detener la imposición que se les vení­a encima se haya convertido en una esperanza para todas aquellas personas que sufren en sus propias carnes los estragos de la actual situación socio-económica. Gamonal es la primera ficha de un domino cuyas consecuencias finales están aún por determinar, un sí­mbolo de contestación que pone de manifiesto que la movilización social de los que siempre han estado oprimidos y olvidados por los poderes constituidos puede dar sus frutos. Gamonal representa un punto de inflexión que se ha reproducido en otras localidades y que puede significar un antes y un después en la conciencia colectiva de muchas personas.

Gamonal parece un capí­tulo más en los estallidos de barrios olvidados que ante un abuso estallan, la defensa en un primer momento violenta ante la agresión de Estados corruptos, ¿es así­?
Desgraciadamente la atención mediática solo se ha centrado en Gamonal cuando comenzaron a arder los primeros contenedores, se levantaron barricadas o se atacaron las entidades bancarias. Son expresiones de rabia que se desbordaron ante los abusos de poder y la indiscriminada represión que sacudió al barrio. Muchos pensamos que Mayo del 68 no hubiera sido posible sin los cristales rotos y la realidad de Gamonal se obstina en repetir esta misma premisa. Frente al monopolio de la violencia que ejercen las instituciones, el barrio ha tratado de resistir a las agresiones que vení­an dictadas desde el propio Ministerio de Interior que ha ejercido una violencia infinitamente mayor sobre los vecinos. Lo fundamental, sin embargo, ha sido la movilización continuada de miles de personas que diariamente han salido a la calle y que continúan dando vida a un proceso asambleario que está lejos de ser desactivado.

Los medios generales trataron de descalificar y aislar la lucha de Gamonal mediante reportajes y conexiones en directo absurdas llamando a los vecinos incí­vicos y perversos. ¿Qué papel habéis jugado vosotros, mucho más cercanos al vecindario, durante el conflicto?
Desde medios de comunicación alternativos como Diario de Vurgos u otros proyectos similares que existen en la ciudad, llevamos años tratando de contrarrestar el monopolio mediático que los grandes grupos de comunicación ejercen sobre la ciudadaní­a.  La troika Poder Polí­tico-Empresas Constructoras- Medí­os de Comunicación, ha tratado de imponer su punto de vista interesado sobre el conflicto haciendo uso de una sibilina manipulación contra el amplio sentir popular  En este y otros tantos conflictos, Dairio de Vurgos trata de ser la expresión de una realidad que no se manifiesta a través de las rotativas de los grandes medios. Hemos tratado de ser en definitiva un grano de arena en esta lucha y las miles de personas que se han manifestado durante más de una semana frente a la sede del Grupo Promecal pueden significar un despertar de las conciencias frente a la tergiversación de los medios oficiales.