A un pobre hombre de origen ecuatoriano que un buen día se le ocurrió meterse a soldadito en el ejercito español otro buen día se le ocurrió abandonar el puesto de soldado que ocupaba sin dar explicaciones a nadie. El han detenido y le imputan un delito militar que puede significar su ingreso en prisión. Hoy a la esclavitud se la llama libertad, a la guerra se la llama paz…
sonidos de la calle
pena la justa