Hace unos días leía indignado en un medio que no recuerdo palabras textuales de un concejal burgalés: “Aumentaremos nuestra deuda para poder financiar todos los proyectos que tenemos en marcha, sin aumentar la presión fiscal a los ciudadanos“. Una semana después la misma persona subía los impuestos a los burgaleses un 5,5%.
Antes de analizar la patraña y las estupideces que se permite esputar este individuo al que no pondré nombre propio, podríamos hacer un breve análisis de en que posición están actualmente los ayuntamientos en general. Los ayuntamientos, (casi) todos, hoy por hoy están en una situación sumamente difícil dada su falta de solvencia, la caída de las ventas de vivienda, la congelación de los créditos y la falta de obra nueva esta haciendo que sus ingresos se recorten un 30%. Esto tiene tres soluciones simplistas o aumentamos los impuestos o recortamos los proyectos o ambas dos.
El concejal burgalés afirma que nos va endeudar, a todos, por una cantidad de dinero que no especifica sin la necesidad de subir los impuestos ni recortar los proyectos. Todo el mundo sabe que pedir dinero prestado significa devolver ese dinero más los intereses al cabo de cierto tiempo. El que pide un préstamo lo hace esperando que aumenten sus ingresos y pueda devolver la deuda. Pero dicho concejal no especifica como van a aumentar sus ingresos y dado que la crisis inmobiliaria que se nos viene encima se prevé que dure largos años la cosa parece de una estafa política.
Hace 2 días los burgaleses nos enteramos que este concejal que decía no iba a aumentar la presión fiscal decide subir los impuestos un 5,5% basándose en el IPC y no contento con eso pretende endeudar mas al Ayuntamiento burgalés sin recortar proyectos, dado que aumentar un 5,5% los impuestos dudo mucho cubra el agujero que puede tener el Ayuntamiento. Sea cual sea la gestión en el Ayuntamiento, esta claro que no la conoceremos nunca, la transparencia es nula, las estafas son muchas y las promesas electorales incumplidas también.
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