Monseñor Gil es el arzobispo de Burgos. Hace unos días se despacho a gusto con una carta pública en la que no deja títere con cabeza, solo le faltó amenazar con la hoguera de la Santa inquisición a todos los pecadores.
Una de las cosas que más me ha impresionado de la carta de este importante personaje burgalés es esta frase a lo Jesulín en la que se refiere a nuestra sociedad: “en una palabra, una sociedad cuarteada en sus estructuras básicas y removida en sus cimientos éticos“. Los curas y Gil sabrán mucho de su teología, no lo pongo en duda, pero no han entendido que es la ética y la confunden constantemente con la moral(explicación). No es casualidad, estos señores son expertos tiranos de la conciencia y no les interesa distinguir ética de moral para ellos son lo mismo y solo hay una ética buena, la que dictan, pobre de aquel que la contradiga pues no entrará en el reino de los cielos.
Según Gil en nuestra sociedad se impide el ejercicio de libre religión mientras la escuela se utiliza como instrumento ideológico, se asesinan a niños, se asesinan terminales, hay muchos parados y bla, bla, bla… el discurso eclesiástico actual es de sobra conocido por todos y no me voy a poner a contarlo en estas líneas. Estos tripa gordas trincan del estado, trincan de la renta, trincan de la bolsa, trincan de sus negocietes y cuando han terminado de trincar se despachan a gusto con los que no les han dejado trincar más, soltando las típicas pero efectivas gilipolleces incongruentes llenas de metáforas absurdas sobre la ética, el infierno, el cielo, satán, el pecado, la vida… Marear la perdiz, comer tarros y ver la paja en el ojo ajeno son cosas que a esta gente se la da muy bien pero mirarse al ombligo, descubrir que la iglesia es un negocio que genera pobreza, sangra hipotecas e invierte en bolsa son otro cuento.
Gil propone una solución a todos los males que según el tiene esta sociedad: “Volver a Dios”, con esta elegante incongruencia se despide en su carta y a mi no me queda claro si para volver a Dios hay que volver a los tiempos de Torquemada, hay que suicidarse o abrir una cuenta en cajacírculo.
Anónimo
El de la foto esa de la caja tambien es el arzobispo. ¿No? ¡Que bien se lo montan el clero!
aCEBANO
jaja… si, todo a la vez…
ácrata
Sigo sin entender por qué haceis mención a esta gentuza en este espacio web, como si no tuviesen ya suficiente publicidad con los medios y espacios que controlan.
Que se metan su reino de los cielos y su infierno por el santo ojo del culo y se pierdan de una vez en la oscuridad mental que predican.
Anónimo
Jeje, ácrata algo de razón tienes, pero de vez en cuando esta bien hablar de estos tontos la chorra, por echarnos unas risas.
buh!
la verdad esque a mi me parecen unos cabrones y que solo comen tarros para el dinerito xo lo de que genera pobreza no se en que aspecto lo direis y lo de las ipotecas igual